Por encima del océano de nubes.

30.4.12

Cristales sónicos.

No hay loco que no afirme que la cordura no lleva a ningún sitio
por ello, yo, el arlequín que carece de nombre y vida
soy el único poseedor de una verdad estanca
y vacía de espíritu, que no pertenece
ni a hombres ni a bestias,
pero destila todo
sufrimiento.

18.4.12

Olvidar, no...

¿Si tuvieses el poder que harías con él?

Un poder para cambiarlo todo,
que con un simple pensamiento
todo se haga realidad.

Riquezas, fama, mujeres, hombres...
Amor, lluvia, redención...

No existe el humano bueno
estamos corruptos, muertos
no somos ni nuestra sombra
nacemos en la luz, vivimos en la oscuridad.

Somos la víctima que el tiempo se cobra,
vagos entes sin espíritu,
cadáveres reanimados.

No somos,
estamos solos.

No soy,
nunca fui.

Nos regodeamos en nuestra locura
y luego, como seres despreciables,
gritamos nuestra amargura.

Quizá no merezcamos vivir...

O si.

Amamos, somos emotivos,
nuestros "te quieros"
sobrepasan los cielos.

Somos máquinas con corazón,
mentes que tienen razón.

No somos malos,
solo existimos,
no somos claros.

La esperanza me rodea, ni siquiera me intente cortar con la hoja de la muerte, existo, vivo, y pienso que por ello me mantengo de pie, sigo adelante, invariable. Insensato. Crédulo. Condenado a la perdición. Moriré. Y mientras ello ocurra, seré.

Alimento mi locura con textos como este mientras espero que alguien me la arranque de cuajo, y pueda ser un loco cuerdo.

Fui, soy, creeré.

8.4.12

Gente.

Mientras miraba las heridas en mis manos me preguntaba
¿que soy yo en realidad?
Un vago espejismo, un fantasma con esperanza
creo... no lo sé.
Lo que todos esperan de mí
un futuro prometedor
ganarme la vida
ser una ovejita más
por eso soy un fantasma
como todos.
Y sigo sin perder la fe en la gente
en los humanos, en esa persona en concreto que me espera
aunque realmente no sepa quién es
como es
su sexo...

    Caras tristes en tumbas abiertas
por sonidos de arpas cubiertas
por sudarios de la noche
y silbidos del demonio a mi derecha.

No soy el poeta que todos piensan
soy más como un reflexivo pensador
en lo que escribo solo está mi mente,
una vez hubo cabida para otra
pero se ve que no estaba cómoda aquí
se fue sin dejar rastro, pero haciendo mucho ruido.

    Humanos en la guerra
caballeros sin honor
solo los fuertes merman
ante el sufrimiento y el dolor.

Hoy, como tantos días, me duele la mente
por divagar, por huir a mi mundo, por llorar conmigo mismo
soy como el pegamento, sácame de mi recipiente
y jamás volveré a ser igual.

    Las leyendas cuentan que uno aparecerá
descenderá de los cielos como ángel guardián
luchará por nosotros, prescindirá de su libertad
pero como tantos otros al final, perecerá.

No me queda sino despedirme
hoy ha sido un escrito extraño
no se lo que pienso, no se que vais a pensar
y sin embargo lo muestro, que más da
pues no es más que mi mente,
toda la maldita realidad.